Nuevo taller de vínculo prenatal
Durante mi formación como psicoterapeuta oí y leí muchas veces lo importante que es la experiencia de apego en la infancia para la salud mental a lo largo de toda la vida. Pero siempre nos hablaron de las experiencias infantiles postnatales, como mucho nos mencionaron el concepto de temperamento para explicar lo que el bebé «traía»y lo que le hacía diferente de otros bebés ya en el momento de nacer. Por eso decidí aprovechar el trabajo fin de master para investigar. Y encontré un campo de estudio e intervención muy incipiente pero muy interesante. Los pocos datos de los que disponemos vienen a señalar que, efectivamente, los bebés sienten y recuerdan lo que les pasa antes de nacer y que eso tiene una influencia en su desarrollo posterior. Así que si nuestro trabajo trata de promocionar la salud mental y prevenir trastornos, ¿por qué no empezar ya en esas primeras experiencias? Debemos abordar la perinatalidad.
¿POR QUÉ UN TALLER DE VINCULO PRENATAL?
La importancia del vínculo padres-bebé para el desarrollo físico y neuropsicológico y para la salud física y mental del niño está demostrada y aceptada ampliamente por la comunidad científica. Sabemos que el tipo de apego que favorece de manera óptima el desarrollo y la salud es el apego seguro, y que éste se produce aproximadamente en un 60 % de los niños. También sabemos que los apegos subóptimos desarrollados por el resto de la población constituyen un factor de riesgo para muchos trastornos psicosomáticos, trastornos mentales, problemas de comportamiento, trastornos del aprendizaje y problemas emocionales, como la desregulación del estrés, que a su vez se encuentra en el origen de numerosas enfermedades somáticas.
Las investigaciones recientes en psicología y psiquiatría perinatal indican que el vínculo prenatal es un factor protector del vínculo postnatal, por lo que la prevención y la promoción de la salud mental deben comenzar en el embarazo, con la promoción de vínculos prenatales positivos. Existen numerosos y variados factores que influyen en la construcción del vínculo prenatal padres-bebé: desde la relación de pareja hasta las representaciones socioculturales sobre la crianza, pasando por la capacidad de la gestante para regular el estrés y su propia historia vincular. Un complejo conjunto de factores que los/as psicólogos/as perinatales podemos ayudar a abarcar, de manera complementaria, y a ser posible, coordinada, con otros profesionales de la salud que atienden y acompañan a los padres durante el embarazo.
Existen diversos programas de demostrada eficacia en países anglosajones y de América Latina, pero son todavía muy escasos en España, donde la psicología y psiquiatría perinatal es un campo de reciente creación. Hasta el momento, se está realizando un importante esfuerzo por abordar el trastorno mental materno, con especial atención a la depresión postparto. Sin embargo, carecemos aún de intervenciones preventivas con un enfoque desde la salud dirigidas a población general. Ni siquiera hay una conciencia de esta necesidad. Queda mucho por hacer, pero podemos empezar informando, divulgando y sensibilizando.
¿DE QUÉ VA EL TALLER?
Mi compañera Laura y yo coincidimos en que lo más importante es crear un espacio de escucha mutua. ¿Cuántas veces se le pregunta a una mujer embarazada cómo está? Cómo está de verdad, por dentro. Yo misma puedo responder a esta pregunta porque pasé por ello hace un año: ninguna. Es el estado sano (y subrayo lo de sano) más medicalizado que existe, plagado de pruebas y visitas médicas, y en ninguna se le mira a los ojos a la mujer y se le hace esta simple pregunta. Y con esto no pretendo culpabilizar a los médicos. Como bien dice Ibone Olza, todos hacemos lo que podemos y lo que nos parece más correcto. Los médicos, simplemente, no son conscientes de la importancia de ser escuchada. O quizá tienen miedo de lo que puedan tener que escuchar y de no saber qué hacer con ello. En cualquier caso, creemos que es imprescindible que una mujer gestante pueda expresar cómo se siente sin ser juzgada. Y a partir de ahí, en la medida en que podamos, acompañarla para que pueda elaborar y gestionar lo que sienta y ayudarla a mirar a su bebé y a decidir cómo quiere relacionarse con él. Quizá haya mujeres que no encuentren en su ajetreo diario el momento de dejarse sentir para conectar y comunicarse con su bebé. Aquí encontrarán un espacio seguro y acogedor para hacerlo.
Bienvenidas.